Pregunta electoral (IV): ¿Sabrá Rajoy que la privatización es el asesino?

Ni el mayordomo; ni “cherchez la femme”. Tampoco el sistema, como siempre supimos y nos ha recordado el excelente Salem. Corre el rumor, entre los seguidores de la novela negra, sobre un nuevo paradigma: la privatización es el asesino.

Quienes han leído lo último de Glynn o de Roslund y Hellström nos dan cuenta a los devotos de un policía privado que causa una masacre o de un servicio de información que se externaliza en una más barata red de soplones. Como la cosa de los espías de Granados, para entendernos.

A lo mejor, en este caso la novela negra no describe sino que anticipa nuestro futuro. El futuro de un país que en lugar de tener Consejo de Ministros lleva camino de tener Consejo de Administración.

¿Se lo habrán contado a Rajoy? Desde luego la derecha lo sabe. Cuenta el citado Salem que los argentinos, tras el corralito, se hicieron más humildes. Sin embargo, los neoliberales no se han vuelto más humildes sino más insaciables. La desregulación neoliberal causante de un dolor social con pocos precedentes en tiempos de paz solo prevé una vuelta más de tuerca, aprovechando el desconcierto de la izquierda.

Tras aquellos escarceos sobre la refundación moral del capitalismo nos hemos pasado directamente al choriceo especulativo sin más zarandajas. Choriceo al que la derecha española desea contribuir para que los mercados confíen, faltaría más.

Las privatizaciones de la Espe y la Cospedal. El listado de privatizaciones que deja ZP porque los amigos banqueros ya tienen bastante con lo suyo. El escaso futuro de las televisiones autonómicas; el no menos rotundo troceo de la sanidad pública y el traspaso de renta pública a la enseñanza concertada. Estas son las armas de Rajoy. O sea, privatización a troche y moche; que pase el patrimonio a algún amigo.

No se me animen: no será la privatización para mejorar la vida del personal. La privatización es para pagar deuda, sanear bancos y pasarle unas perrillas a los mercados. Nos reducirán la deuda pero nos dejarán sin patrimonio y sin recursos sociales.

La privatización es el asesino. Háganme caso y cuéntenlo por ahí.