Benedicto al frente de las hordas pasó por aquí a salvar almas y aleccionar conductas. A mí me quedan algunas dudas:
1.- ¿ Un presidente, titular de institución soberana de cualquier naturaleza, debe inclinarse, arrodillarse, cabecear ante otro jefe de estado o confesión o eso es signo de sumisión intolerable?
2.- ¿Porqué, tratándose de la iglesia, la policía se comporta como fuerza de ocupación y nadie da la cara?
3.- ¿El radicalismo cristiano es una expresión “guerracivilista” (Esperanza dijo) o solo a mí me suena a “guerra santa”?
4.- ¿Soy yo solo o nadie ha oído a Benedicto condenar la violencia de los pederastas?
5.- ¿No habíamos perdonado a Galileo? ¿Otra vez contra la ciencia?
6.- ¿En que Sagrada Escritura dice que para seguir a Dios hay que seguir a sus Portavoces?
7.- ¿Piensan los auditores de la iglesia dar cuenta de la pasta recibida de los peregrinos y los niveles de calidad prestados a estos? ¿Más aún nos dirán los banqueros y empresarios cuantos impuestos se deducirán por patrocinio? ¿Sabremos los costes de servicios públicos aportados?
8.- ¿Por qué entre las opciones de Benedicto (sacerdocio, vida consagrada y matrimonio) no aparece el trabajo?
9.- ¿ Esto de que hay que fomentar la mansedumbre entre los jóvenes se refiere a los que vociferan e insultan a los laicos o a los que aplauden sin más al poder de la iglesia y los gobiernos?
10.- ¿Será Rouco Papa o banquero?