Los humanos se comieron a los Neandertales

Ya estáis pensando, malvados, que el titular es una metáfora con perversa intención. Pensáis que voy a escribir que algunos alegres muchachos han dado cuenta de una banda fascista; creéis que escribiré sobre alguna derrota política del Presidente del Milán. Algunos pensáis que se trata de que Rajoy haya acabado, finalmente, con Camps o, incluso, algún exagerado habrá creído que anuncio que los jueces turcos, que serán jueces europeos, han dejado de perseguir a escritores y periodistas.

No; si la culpa es mía por creer que escribir con fina ironía y metafórica mala uva hará que me entendáis. Pues, no; el titular es una afirmación científica de las que os traigo aquí pensando en mejorar vuestra vida. Esta mañana, haciendo mi recorrido por la prensa de calidad, que no todo van a ser blogs y cosas de esas impresentables, me he topado con tan transcendente noticia.

Un experto en fósiles. Fernando Rozzi, ha deducido de una mandíbula de Neandertal, encontrada en Les Rois, Francia, que los primeros humanos no sólo mantuvieron una guerra civil con los neandertales sino que se los comieron, en un ejercicio caníbal, y utilizaron sus dientes para hacer collares y sus cráneos como trofeos.

Y vosotros y vosotras os preguntaréis: ¿y esto cómo cambia nuestra vida? Pues de forma notable porque, en caso contrario, no os lo comunicaría en esta página que sólo suma informaciones transcendentes para vuestra vida cotidiana, como bien sabéis.

Dos cambios dramáticos pueden ser apuntados. Imaginad; Francia, la cuna de la politesse, la cortesía, la civilización, la “enciclopedí” y la “diplomací”, pasará a ser conocida como el sitio donde consta que los humanos se comían a los Neardentales. No hay imagen que soporte tamaña felonía histórica.

Cambio dramático, también, en los discursos estratégicos. Con lo bonito que quedaba decir que el cambio climático los había barrido de la Historia.

No; preparaos. Rajoy llamará a su primo; Aznar pronunciara conferencias anunciando la buena nueva: hordas de talibanes procedentes de África se comieron a los primeros europeos, en ausencia de un modelo de seguridad atlántico, naturalmente. Benedicto deberá reconocer que nuestro origen no viene del dedo de Dios o de un machote seducido por Eva sino de unos caníbales, en guerra civil pantagruélica, con los Neardentales.

Ahora sabéis que quiere decir eso de que todos tenemos un cadáver el armario. Mirad el de vuestros antepasados: si encontráis un collar de dientes estáis perdidos: se comieron un Neardental y vuestra vida ya no será la misma. A que ni os lo imaginabais.