Ayer teatro; hoy opereta.

Ayer me pase por el teatro; hoy toca opereta. La de ayer se titulaba “a Berlusconi ya no le gusta el futbol”. La de hoy se llama “Que se encargue la policía”. Aooche en el verde de Concha Espina me lo pase bien; hoy, me ha parecido todo un poco bufo.

Después de renovar el pensamiento económico progresista para convertirlo adecuadamente en liberal le quedaba al áureo líder renovar la izquierda para convertir a Rubalcaba y el grupo Prisa en sus líderes.

El primer cometido de este nuevo gobierno es salir en los periódicos. El segundo es tratar de seducir al votante de izquierda y, desde luego, al del PSOE, que abandonaba el barco a raudales, vendiendo vieja izquierda, izquierda socioverde o lo que haga falta, izquierda sindical. Lo de cambiar la política ya lo dejamos para otro siglo que ahora se trata de que el la gente de El País, la Ser y la Televisión oficial nos hagan una rueda de mensajes para tranquilizar a Alcaldes y Concejales que se nos estaban poniendo chulitos con lo de que el prócer diga que no se presenta.

Ahora resulta que las chicas además de no salir en los periódicos, estaban siempre con cara de enfadas y sólo ocupándose en cosas progres como la igualdad o la vivienda, la pesca y zarandajas de esas que no nos dan votos ni sirven para nada, como todo el mundo sabe. Ponemos a Leire que predicará en la tele el cambio planetario e insultará al PP en todos los desayunos y listo.

Zapatero le ha encargado a la policía que recupere el voto que se iba hacia la izquierda; que se ponga a predicar negociación a troche y moche, a ver si convencemos a la gente que ahora si que somos buenos, de buenos de la muerte, y dejan de pensar en izquierdadas de esas en las que estaban pensando. Dejemos a los catalanes y los vascos que pierdan las elecciones y pongan a nacionalistas serios y responsables a cargo del asunto pero tratemos de no perder Andalucía y Castilla La Mancha que estos nos mandan a la mina al José Luís en un pispas.

No hace falta rectificar que ya Rubalcaba les convence de que la rectificación favorece a Rajoy. Nada de mirar a la izquierda que la izquierdista aquí es la Aguilar. A por ellos, a barrer a los de la izquierda, el cambio y la rectificación vendiendo una más de humo. Que no se diga.