Alerta de Pepiño: sabed quienes son los malos, que no tenéis ni idea.

Apresad a los controladores; quemad el Financial Times en los quioscos; buscad a ese “mercado” malvado y dadle una paliza…que la revolución no pare porque Pepiño ha hablado: van a por ellos, los buenos, sabios y santos, y tu y yo hacemos de compañeros de viaje. Menos mal que Pepiño está en todo. El sabe lo que pasa, el sabe que nos estamos equivocando de enemigo. Si; si, mírate al espejo: hablo de ti.

Eres tú quien cree que la culpa es de los bancos que han usado tu dinero para pagar sus deudas, jugando en bolsa. Hablo de ti que crees que con otra política fiscal el déficit público sería más sostenible. Hablo de ti que sigues esperando obra pública y vivienda pública para que un sector entero de la economía no desaparezca. Hablo de ti, iluso, ilusa, antigualla, que crees que el gasto público debe ser anticíclico y que la austeridad pública es para las épocas de bonanza. Ni idea; no tienes ni idea.

Menos mal que Pepiño está en todo. Esta es la conspiración: los controladores, nacionales e internacionales, los medios extranjeros y los especuladores, que junto al traidor antipatriota de Aznar y los propios, léase Barreda y Almunia, han urdido una gravísima conspiración para evitar el alineamiento planetario por Leire profetizado y el liderazgo de Zapatero, ese liberador de ancestrales trabas sociales, sobre la nueva cosmogonía.

Los medios internacionales se han vendido de nuevo al capital financiero, especulador y expropiador; la vieja alianza de clase entre burguesa propietaria y financiera y sus corifeos instrumentos de propaganda burguesa ha resucitado; la alianza impía a la que habíamos hecho desaparecer con nuestras políticas sociales, afamadas allende nuestras fronteras, ha regresado por que tú y yo, y casi todos, estábamos distraídos pidiéndole al gobierno una política social contra la crisis.

Dramática distracción que ha pagado el gran José Luís que no tenía tiempo de alertarnos porque estaba alineando el planeta, como Leire profetizó. Ellos, los controladores, los medios internacionales, especialmente los pérfidos anglosajones, los especuladores os han utilizado para acabar con el periodo más glorioso de nuestra historia. Pero resistiremos.

Despertad, seguid a Pepiño por el camino de la causa, prietas las filas, recias, marciales, afrontad el ataque exterior, parad la conspiración, abandonad los cantos de sirena de sindicatos, blogueros, críticos, ellos son compañeros de viaje de la conspiración. A la calle a buscar a los malos.

Porque sabed que, desde el advenimiento de la nueva era, en bolsa no se jugaba ni especulaba; sabed que nunca los periódicos internacionales, pérfidos anglosajones a la cabeza, habían exigido el cambio del sistema de pensiones ni la reforma laboral; sabed que nunca el progresismo revolucionario pago ingentes cantidades a los controladores; sabed que nunca, pero nunca nunca, un socialista ha convocado a la inversión extranjera especuladora a golpe de altos tipos de interés, que aquello de la peseta alemana es un invento burgués; sabed que nunca, pero nunca, el mercado liberalizado había buscado beneficios, porque hasta ayer todos los beneficios, como se sabe, eran sociales….

Es que se me pone una cara de tonto…